Arte de milenaria civilización china Shu llega a Ciudad de México a través de muestra digital

MÉXICO, 11 dic (Xinhua) -- El arte de la milenaria y misteriosa civilización china Shu podrá ser apreciada por los mexicanos a través de una muestra digital, que fue inaugurada este miércoles en el Museo Nacional de las Culturas del Mundo en la Ciudad de México.

La exposición "La esencia espiritual del mundo. Exhibición digital de arte de la antigua civilización Shu de la Provincia de Sichuan" reúne fotografías de máscaras y piezas halladas el siglo pasado en el yacimiento arqueológico de Sanxingdui, que data de hace 5.000 años.

"La imaginería y la cosmovisión que a través de exposiciones como ésta podemos descubrir genera nuevas lecturas sobre nuestro patrimonio", dijo a Xinhua el coordinador de Museos y Exposiciones del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Juan Manuel Garibay.

El antiguo imperio Shu, que floreció a finales del Neolítico en la llanura de Chengdu, capital de Sichuan (suroeste), era una sociedad religiosa primitiva de la que se conservan pocos registros escritos y el área que ocupó es considerada parte importante del origen de la civilización china.

En el museo contiguo al Palacio Nacional, en el corazón de la capital mexicana, los asistentes podrán observar fotografías en gran formato de piezas como una máscara de ojos prominentes de cobre o un rostro humano de oro con más de 3.000 años de antigüedad.

Igualmente, la muestra exhíbe la imagen de una cabeza de bronce con máscara de oro que se calcula fue hecha en el periodo entre los años 1.600 a.C. y 1.046 a.C., la cual pertenece a la colección del Museo de Sanxingdui.

Melissa López, una universitaria originaria del noroeste mexicano, recorrió la exposición después de que las autoridades la inauguraron y expresó que le había llamado la atención el trabajo que los Shu hacían con la piedra jade.

"Es muy antigua y aún así la desconozco bastante, por eso quiero acercarme y ver cómo es. No tengo una noción, no sabía qué esperar y me está agradando bastante", dijo a Xinhua la estudiante de Mercadotecnia en la ciudad de Mexicali, capital del estado de Baja California.

Durante el acto de inauguración, Garibay, el coordinador de Museos y Exposiciones del INAH, destacó que un propósito de la muestra era refrendar los lazos de amistad y de cooperación entre China y México, dos culturas milenarias.

Por su parte, el director de Administración de Prensa y Publicaciones del gobierno de la provincia de Sichuan, Zhou Qing, explicó que la civilización Shu es una perla deslumbrante que contribuye al patrimonio mundial, igual que lo es la cultura Maya que floreció en el sureste de México.

La apertura de la exhibición fue seguida del seminario internacional "Diálogo entre las civilizaciones Shu y Maya", en el cual especialistas chinos y mexicanos abordaron la cosmogonía y la importancia cultural de las dos civilizaciones milenarias.

Zhou expuso su deseo de que los expertos de ambos países profundicen en la investigación y fortalezcan el conocimiento individual y común en torno a las dos antiguas civilizaciones, al igual que den un impulso al entendimiento recíproco.

"Promover las civilizaciones Shu y Maya, ademas de intercambio y diálogo que crucen tiempo y espacio, nación y región, son la misión en común entre la provincia de Sichuan y México", planteó el funcionario chino.

Para la directora del Museo Nacional de las Culturas del Mundo, Gloria Artís, la exposición y el seminario resultan una oportunidad para que los mexicanos conozcan una cara arqueológica del inmenso acervo cultural de China.

"Se vislumbran nuevos horizontes de conocimiento e intercambio que, sin duda, no sólo serán de por sí fructíferos, sino que contribuirán a fortalecer aún más los ya antiguos lazos de amistad y cooperación entre México y China", apuntó Artís.

La organización de la muestra se realizó en colaboración entre el Museo Nacional de las Culturas del Mundo, la embajada de China en México, el Centro Cultural de China en México y la Asociación China de la Península de Yucatán.